martes, 31 de marzo de 2015

LOS MEDIOS Y LA CONSAGRACIÓN DE MONSEÑOR FAURE.-

DOS SOLITARIOS OBISPOS CATÓLICOS PLANEAN ACRECENTAR DESAFÍO CISMÁTICO A ROMA.


REUTERS


NOVA FRIBURGO, BRAZIL | BY STEPHEN EISENHAMMER
(Reuters) - Dos renegados obispos católicos planean consagrar una nueva generación de obispos para extender su movimiento ultra-tradicionalista llamado “La Resistencia”, desafiando al Vaticano, dijo uno de ellos en un remoto monasterio en Brasil.
El Obispo francés Jean-Michel Faure, consagrado apenas hace dos semanas por el Obispo negador del holocausto Richard Williamson, dijo que el nuevo grupo rechazaba al Papa Francisco y lo que llamaron su “nueva religión”, y que no entablarían el diálogo con Roma hasta que el Vaticano vuelva atrás.
Williamson y Faure, que fueron excomulgados por la Iglesia Católica Romana cuando el primero consagró obispo al segundo sin la aprobación del Vaticano, son ex-miembros de un grupo disidente más grande que ha sido una espina en el costado de Roma durante años.
Su movimiento disidente es pequeño - Faure no dio una estimación de seguidores - pero el hecho de que planean consagrar obispos es importante porque significa que su cisma puede continuar como una forma rebelde del catolicismo.
 “Seguimos a los papas del pasado, no al actual”, Faure, de 73 años, dijo a los reporteros el sábado en el Monasterio de la Santa Cruz en Nova Friburgo, en la jungla montañosa a 140 km (87 millas) hacia el interior desde Rio de Janeiro.
 “Es muy probable que, en tal vez uno o dos años, tendremos más consagraciones”, dijo, añadiendo que ya había dos candidatos para ser promovidos al rango de obispo.
El monasterio había dicho que Williamson ordenaría un sacerdote allí el fin de semana, pero no fue visto por los reporteros, y el clero dijo que era imposible hablar con él. Faure ordenó al sacerdote.
Preguntado cómo se llamaba el grupo, Faure dijo: “Creo que podemos llamarnos Católicos Romanos primero, en segundo lugar, San Pio X y ahora… la Resistencia”.
SEPARADOS DE LA FSSPX

La Fraternidad San Pio X (FSSPX) es un grupo ultra-tradicionalista más grande que fue excomulgado en 1988, cuando su fundador consagró cuatro nuevos obispos, incluyendo a Williamson, a pesar de las advertencias del Vaticano de no hacerlo.
Rechazó las reformas modernizadoras del concilio Vaticano II de 1962-65, y permanecieron atascados en la vieja Misa en latín del catolicismo después que la Iglesia cambió a una liturgia más simple en lenguajes locales.
El antiguo Papa Benedicto readmitió a los cuatro obispos de la FSSPX al redil católico en 2009, pero la FSSPX pronto expulsó a Williamson por el escándalo por su negación del holocausto.
En contraste con Benedicto, el Papa Francisco pone poca atención a los ultra-tradicionalistas de la FSSPX, que afirman tener un millón de seguidores en todo el mundo y un creciente número de nuevos sacerdotes cuando Roma encara la escasez de sacerdotes. Sus tres obispos restantes no tienen estatus oficial en la Iglesia Católica.
Faure dijo que el grupo de la Resistencia no entablaría diálogo con Roma, como lo ha hecho la FSSPX. “Resistimos a la capitulación, resistimos a la conciliación de la Fraternidad San Pio X con Roma”, dijo.
Faure dijo que no estaba seguro de lo que requeriría Roma para volver a sus antiguas tradiciones, pero un conflicto podría ser un catalizador.
 “Si hay otra Guerra Mundial… tal vez la Iglesia vuelva a ser como era antes”, dijo.
El prior del monasterio, Tomás de Aquino, explicó la división de manera simple: “El Papa es menos católico que nosotros”.
Ante la ley católica, Williamson y Faure están excomulgados de la Iglesia pero siguen siendo obispos consagrados válidamente. Esto significa que ellos pueden ordenar sacerdotes en su grupo cismático y afirmar que son católicos, aunque sin la aprobación del Vaticano.
En contraste, las mujeres que son supuestamente ordenadas sacerdotisas por los obispos católicos disidentes, no están válidamente ordenadas porque la ley católica reserva el sacerdocio a los hombres solamente.
Catholic Herald: Un obispo recientemente consagrado por Mons. Richard Williamson ha dicho que ambos desean crear un movimiento global opuesto al Vaticano, conocido como “La Resistencia”.